¿Cuál es el significado de la palabra "pololo"?

Latinoamérica es una zona con una enorme variedad de culturas. El común denominador de todas ellas es la mezcla de culturas originarias con las que vinieron en barcos del otro lado del océano. El resultado es bien visible hoy en día, donde cada país donde se habla castellano, o español, tiene sus propios regionalismos. Como lo es la palabra “pololo”.

Originario de Chile

Sabido es que el compartir un idioma no significa que se tengan las mismas palabras para todo. La palabra “pololo” se utiliza en Chile, y proviene de la palabra mapudungun (mapuche) “piulliu”, que significa “mosca”. También se denomina así a un escarabajo de color verde brillante, muy atractivo a la vista. Esto hace alusión al novio que ronda a la novia, igual que mosca a la fruta, mostrando sus mejores colores. De ahí también las palabras "polola" y "pololear".

No es lo mismo que “ser novios”

Ya en su país de origen se pone en claro que pololear y tener un noviazgo no es lo mismo. El pololo es menos serio, puede que sea más un experimento o un primer intento que algo que (se quiera que) dure. Cuando se habla de noviazgo, es que se han puesto en claro algunos puntos y dejado atrás algunos obstáculos, y puede que se haya hablado de formalizar la relación de forma legal, o ante la familia.

No es lo mismo “pololear” que “estar pololeando”

Aunque sea menos serio que el noviazgo propiamente dicho, hay una diferencia entre “pololear” y “estar pololeando”. El “pololear” significa que se está cortejando a una señorita, o el comportarse de determinada manera para obtener algo, mientras que el “estar pololeando” significa que la damisela en cuestión ha aceptado ser cortejada.

Trabajo pequeño y de poca importancia

Además del cortejo, la palabra tiene otro significado, más relacionado con el mundo laboral. En Argentina, por ejemplo, se utiliza la palabra “changa” para un trabajo pequeño, sin mucha importancia, que no se comunica a ninguna entidad laboral por su escasa relevancia y, por lo general, de poca remuneración. En Chile se utiliza la palabra “pololo” para estas actividades.

Prenda de ropa de mujeres y niños

La tercera definición de “pololo” se refiere a una prenda de ropa, muy usada por niños pequeños en los siglos pasados, y por las mujeres que hacían gimnasia a principios del siglo pasado. Se trata de un pantalón corto bombacho, que en los tiempos de la colonia en América (hasta el siglo XIIX o XIX) se usaba como prenda interior femenina, junto con las famosas capas de enaguas, debajo de los vestidos.

Sin medios o voluntad para ser novio

Otro de los significados de “pololo” se refiere, no a la acción o la relación en sí, sino a quien la ejerce. Un “pololo” no tenía ni los medios ni la voluntad para ser el novio de la señorita que intentaba cortejar, porque no tenía intenciones de llegar a tener un futuro con ella a no ser como amante, en vez de compañero de vida o esposo. Por regla general, quería algo poco serio, o de corta duración.

Mascota de un cuerpo de bomberos

Esos escarabajos verdes que fueron mencionados al principio se usaron como insignia de un cuerpo de bomberos en Santiago, capital de Chile, en el año 1880. Este insecto se acercaba a las luces brillantes, como las lámparas de parafina de la época, o el fuego, lo consideraron una buena mascota. La insignia, de un color verde agradable a la vista, se utilizaba en el ojal de la corbata o en la solapa para mostrar que se pertenecía al cuerpo de bomberos.

Las novias de los bomberos, las “pololas”

Cuando terminaban su servicio, les regalaban las mencionadas insignias a sus novias. Como la insignia en cuestión era bonita, poco común, y la clase de adorno que no podía comprarse, era de gran importancia. Las novias decían entonces que estaban de “pololas”, lo cual ayudó a popularizar el término.

Con el tiempo, cambió el significado

La definición clásica de cortejo ha variado con los años y, con ella, lo que quiere decir la palabra “pololeo”. Ahora es más utilizado cuando se desea una relación sin tanto compromiso, como el ser amigos con derechos, o tener una relación abierta en sus primeras etapas, o el famoso “amor de verano”, por ejemplo.

Imagen de Laura Lauman
Autora del artículo