Apodos cariñosos para amigas
Especialmente en la adolescencia se crean vínculos de amistad muy fuertes entre chicas. En algunas ocasiones estos vínculos duran para toda la vida, e incluso con el paso de los años, y ya en la edad adulta, se mantienen muchos de los apodos cariñosos con los que se bautizaron en esa época.
¿Tus amigas son algo muy especial para ti? Pues demuéstraselo poniéndoles un apodo que puedan recordar siempre. Si no sabes cuál elegir te damos algunas ideas
Cuki: Algo cuki es algo que inspira ternura. Además cuki suena igual que “Cookie”, que significa “galleta” en inglés, por lo que si tu amiga es especialmente dulce, este sobrenombre le encajará a la perfección. No es el más original de los apodos, cierto, pero nunca nadie se quejó de ser llamada Cuki. ¿Por algo será, no?
Xoxo: Si tu amiga es rebelde, transgresora y le encanta llevar la contraria, seguro que se encuentra cómoda con este apodo. Xoxo es provocador, e incluso hay quien lo puede encontrar de mala educación. Esa sensación de “prohibido” es lo que la hará sentirse cómoda siendo llamada así por sus amigas.
Chiki: ¿Tienes una amiga que no pasa del metro y medio? Seguro que más de una vez la has llamado Chiki hasta sin darte cuenta. Las chicas menudas y de baja estatura son perfectas para este apodo, que las define de una manera cariñosa. Y además, por lo general, ellas lo acogen de buen gusto porque se sienten identificadas.
Gordi: Lo de los kilos de más en las chicas trae a menudo disgustos y traumas así que cuidado a quien bautizas con este apodo. Recuerda que la idea es que sea cariñoso, así que prohibido utilizarlo con chicas acomplejadas si no quieres que la broma tenga consecuencias. Gordi es ideal para esa amiga flacucha, porque no se sentirá herida y además le resultará gracioso el contraste entre su sobrenombre y su aspecto físico.
Bicho: Cuando tu amiga es un torbellino que no para quieta, cuando hace una trastada detrás de otra, y cuando se convierte en la prota de todos los jaleos en los que os veis envueltas en la pandilla, es una candidata ideal para ser bautizada como Bicho. No es el apodo más dulce del mundo, pero a ella eso no le importa, porque define su personalidad. Y aunque con los años su carácter termine por tranquilizarse, seguro que siempre recibirá con agrado ser llamada de nuevo “bicho” y rememorar aquella etapa de locura.
Xispi: Su carácter es alegre y chispeante, siempre tiene una palabra de ánimo para quien la necesita y es optimista por naturaleza. Con una personalidad así, ¿Quién no querría ser su amiga? Por eso, llamarla Xispi será un regalo para ella, que valorará que su forma de ser sea reconocida y valorada por sus amigas. Además, Xispi es más corto, más sonoro y luce mucho mejor que “la alegría de la huerta”.
Campanilla: Su característica más destacada es su risa. Es la que se ríe por cualquier ocurrencia, a la que todo le resulta gracioso y divertido. En definitiva, es imposible estar triste a su lado porque siempre encuentra un motivo de alegría. Si tienes una amiga que encaja en este perfil, el apodo más cariñoso con el que puedes obsequiarla es “Campanilla”. No sólo será un homenaje al tintinear constante de su risa sino que además, la relacionarás con uno de los personajes de ficción más encantadores que existen, el hada de Peter Pan.
Estos son sólo 7 ejemplos con los que puedes bautizar a las amigas que más quieres, pero existen cientos de ellos. Sólo es cuestión de estudiar su personalidad y asignarles un apodo con el que se identifiquen.
Este punto es verdaderamente importante, porque para que un apodo cumpla su función, ha de ser aceptado de buen grado por quien lo recibe. Así que, basándote en esta pequeña guía, sólo tienes que buscar relaciones entre sobrenombres graciosos y la forma de ser de tus amigas. Es más fácil de lo que crees, y aunque al principio te cueste encontrar alguno que te convenza, verás cómo entre toda la “pandi” no tardáis en encontrar el que os define a cada una de vosotras.