Ideas para lidiar con un esposo demasiado posesivo
Un esposo posesivo y celoso puede confundirse con un hombre de verdad enamorado. Pero ser posesivo no implica amor, sino necesidad de controlar a la otra persona. A la vez, todo matrimonio feliz necesita que ambos miembros de la pareja tengan un espacio propio (para ver a sus amigos, para hacer las cosas que a cada uno le gustan). ¿Cómo lograr que tu marido confíe en ti y te brinde esos espacios tan importantes?
- Acepta que tienes necesidades. Muchas mujeres, frente a un marido posesivo, prefieren mantenerse alejadas de sus amigos y no hacen nada que pueda despertar sospechas o enfadar al otro. Pero lo saludable para ti y para la relación es que te des cuenta de la importancia de cultivar las amistades y de permitirte hacer cosas que te gusten, y de que tu marido entienda y respete esto.
- Evalúa las razones de sus celos. Una pequeña cuota de celos es normal en cualquier relación. Más aún si alguna vez le has dado motivos para celarte. Pero a veces los celos surgen como consecuencia de problemas más profundos de comunicación en la pareja, o de inseguridades del posesivo. Intenta reflexionar para darte cuenta de qué es lo que de verdad molesta a tu marido: ¿Peligra su empleo? ¿Está atravesando una crisis de la edad? Sus actitudes posesivas podrían transmitirte su temor a perderte a ti también.
- Observa tus propias tendencias controladoras. ¿Es posible que, así como te quejas de tu esposo posesivo, tú también te la pases controlándolo o manifestando tus celos? Si quieres que el otro confíe en ti, lo primero que debes hacer es aprender a demostrar tu propia confianza en él.
- Mantén una comunicación franca. Es fundamental que hables con calma con tu esposo y le expliques cómo te sientes con sus actitudes posesivas. Pero no caigas en una cadena de acusaciones. Deja en claro lo mucho que lo amas y lo importante que sería ver que él confía en ti. Prepárate para escuchar lo que él tenga para decirte, procura mantener la calma y no responder de inmediato.
- Busca ayuda profesional. Si después de varios intentos de diálogo, tu esposo sigue mostrándose celoso y posesivo, sería importante que recurras a un terapeuta, un consejero matrimonial o un amigo de ambos que pueda darles una visión imparcial y ayudarlos a superar este conflicto.
- Date cuenta de cuándo el control se convierte en abuso. Si tu esposo estalla en ataques de ira, si te amenaza, si temes regresar a casa o confrontarlo, si te da miedo que te sorprenda cuando estás con tus amigas o incluso si son ellas las que no quieren encontrarse con él, estás junto a una persona abusiva. Es necesario que pidas ayuda (si hace falta, a la policía) y termines con esa relación tóxica cuanto antes.