Consejos para poder hablar de sexo con tu pareja
A veces puede ser bastante difícil sincerarte con tu pareja sobre lo que te gusta y lo que no durante el sexo, ya sea porque no quieres herir sus sentimientos, señalar culpabilidades innecesarias o porque temes iniciar una pelea. Sin embargo, esto es algo que debe hablarse.
Para que todo te salga bien y puedas expresarte mejor, te dejaremos una serie de consejos útiles que seguramente te ayudarán en estas circunstancias.
Comienza a tratar el tema desde otra perspectiva
Una buena idea es no comenzar de inmediato con los puntos a mejorar según tu percepción, sino que puedes ir exponiendo el tema, poco a poco, siempre generalizando.
En lugar de decir: “a mí me gustaría…” opta por un “nosotros los hombres” o “nosotras las mujeres pensamos que…” de esta forma, al convertir el tema en un espacio abierto a múltiples ideas, será más fácil acercarte al tema que quieres tratar.
Usa esta estrategia solo al comienzo. Cuidado con no pasar de allí.
No es lo que dices, sino cómo lo dices
Hay formas de exponer una idea, sin herir emociones ajenas. Intenta guiar tus palabras siempre desde un tono positivo. En lugar de decir: “detesto que…”, mejor di “me gustaría que un día…” y díselo a tu pareja con tono amable, con mucha naturalidad, y sin que suene a reproche.
Escoge el momento adecuado
Cuando tus hijos, tus amigos o familiares se encuentren cerca, no es un buen momento para hablar de lo que quieres durante el sexo. Tampoco lo es, después del encuentro amoroso porque es sumamente incómodo y la persona estará más vulnerable. Escoger el momento indicado es cuestión de sentido común.
Si ves a tu pareja relajada y de buen humor y no hay nadie que pueda interrumpirlos, quizás sea un buen momento para conversar.
Mantente calmado cuando estés hablando del tema
Si tu pareja nota tus nervios o tu ansiedad, no será una buena señal y el resultado puede ser bastante negativo, a que le digas las cosas con calma y de manera tranquila.
Intenta no parecer un perfecto idiota
Nada peor una corrección hecha con un tono de superioridad y grandeza, en busca de minimizar o compadecer al otro. En serio, eso no le cae nada bien a nadie.
No se trata de que hagas sentir como un tonto a tu pareja, sino que ambos puedan encontrar la satisfacción que necesitan y logre compenetrarse más. Y créenos, comportarte como un creído no ayudará en lo absoluto.
Haz preguntas buscando explorar sobre lo que a tu pareja le gusta
Efectivamente, el interés es tuyo ante todo, pero si primero te interesas en lo que tu pareja pueda estar deseando y no te lo dice, abres camino a la reciprocidad, ya que probablemente tu pareja se interese por lo que quieres tú y tome la decisión de preguntar por su cuenta.
Es ahí donde tienes tu oportunidad.
Si vas a hacer observaciones, también ofrece una solución
De nada sirve que te pongas en el papel de crítico y no ofrezcas ninguna solución posible. Si tu pareja está atenta escuchándote, es momento de hacer tus propuestas. Quizás en el fondo tu pareja tenía la misma inquietud y esta conversación ayude a que se ponga de acuerdo, sin tanto problema.
No compliques la conversación con términos raros
No tengas miedo a exponer claramente lo que piensas e intenta no usar eufemismos para expresarte. Procura llamar las cosas por su nombre, de ese modo tu pareja entenderá mejor qué es lo que estás tratando de decirle.
Usar metáforas tampoco es una buena idea, ya que cada quien puede interpretar una metáfora a su modo, así que cuando se habla de sexo, lo mejor es ser conciso y hablar con claridad.
No tomes a mal si te hacen una observación a ti también
Cuando inicias una conversación sobre cómo mejorar los encuentros sexuales con tu pareja, debes estar consciente que puedes recibir un par de observaciones también. Así que nada de enojarse por eso.
La idea de esta conversación era exponer las cosas que tu pareja y tú disfrutan y lograr mejorar su relación, por lo tanto, intenta no espantarte con lo que te pida y muéstrate abierto a sus sugerencias y propuestas, así como esperas que tu pareja esté abierta a las tuyas.