Trucos para dejar de ser una novia celosa

Los celos no te están haciendo ningún bien, y lo sabes. Si ya eres novia de alguien, debes de estar al tanto que las relaciones humanas toman tiempo y trabajo, de ambas partes. Así que si quieres dejar de ser la novia celosa, este artículo es un buen sitio para empezar.

Acepta que eres celosa

El primer paso para resolver un problema es aceptar que existe dicho problema. Cuando aceptes que sí, que eres una novia celosa, podrás comenzar a trabajar sobre ello, y para eso necesitas ayuda. Dile a tu pareja lo que pasa, y pídele apoyo. Si es una persona decente, te dará una mano, al menos.

Averigua por qué estás celosa

Piensa en los motivos por los cuales sientes celos. A veces, es porque estamos enojadas por nuestras parejas por algo, pero es mucho más fácil celarles que sentarse a hablar sobre el problema que causó todo. La comunicación no puede faltar en una buena relación.

Deja el pasado en el pasado

Todo el mundo tiene cosas que lamenta por años, esas que se te aparece cuando quieres ir a dormir, y te hacen morir de vergüenza por no haber hecho esto o dicho lo otro en ese entonces. Eso le pasó a una persona que ya no eres tú, porque has cambiado. Tu yo del pasado ya no existe, ya sea a nivel científico (cada siete o más años todas tus moléculas se renuevan) o de madurez.

Cree a tu pareja

Sonará feo, ¿pero qué te parece si le crees a las persona con la que estás? Por algo decidieron estar en una relación, estimada persona. La confianza es indispensable en una buena relación humana, y que no confíes en tu pareja es insultante para él o ella. Si te resulta demasiado difícil, pretende que confías, y poco a poco encontrarás la fuerza para hacerlo de verdad.

Alarga la correa, y dale más libertad

Si tu pareja es una persona más o menos respetuosa y sensata, no irá de cabeza a un sitio de citas frente a ti. Confía más, dale algo de espacio extra, y observa lo que sucede. El mantenerle encerrado en casa contigo sólo hará que te resienta, y vea a la relación como una cárcel. Cada quien debe tener su propio espacio.

Deja de compararte con otras personas

¡Muy fácil decirlo! Hay una frase que dice “no envidies mi progreso sin ver mi sacrificio”. Las personas no nacen iguales, por mal que suene: hay quienes tienen genes más saludables, o familias ricas, o viven en distintos sitios, y eso influye en sus vidas. Eres persona, no eres perfecta, y algunas cosas te saldrán mal. Así es la vida.

No, y repito, no juegues “juegos”

Las películas románticas distan mucho de reflejar la realidad. El jugar al juego de los celos sólo hará que la relación de pareja se deteriore, digan lo que digan las películas y novelas románticas. A la corta o a la larga, sólo hará que sientan desagrado de estar con su actual pareja.

Deja de confundir fantasía y realidad

El universo en el que vives se rige por reglas que la ciencia aún no ha descubierto. Por eso, lo que te imaginas que puede pasar nunca será tan detallado como lo que pasará en realidad. No te angusties (qué fácil decirlo) por lo que aún no ha pasado, y espera a ver qué pasa.

Ámate a ti misma, mujer

Los celos surgen de la propia inseguridad de quien cela. Como no tiene la certeza de ser alguien que valga la pena, que merezca que le amen, empieza a dudar que su pareja de verdad esté en la relación con ella porque la quiere. Y eso lleva a buscar “pruebas” de que la están engañando. Una persona con autoestima no es celosa.

Si todo lo demás falla: el amor no es algo de una sola vez

La cultura actual quiere que las mujeres piensen que el amor es un cervatillo que, ante el mínimo movimiento, huye. Que por eso deben de hacer todo lo que su enamorado les diga, o si no, nadie las amará y serán infelices para siempre. Si tus celos no te dejan disfrutar de tu relación, quizás sea hora de romper, arreglar tus problemas más graves, e intentarlo de nuevo (con la misma persona u otra).

Imagen de Laura Lauman
Autora del artículo