Las ventajas de tener una novia fea
Seamos sinceros. Tener una novia fea no entra en los planes de nadie. Cuando deseamos que llegue el amor a nuestras vidas, queremos que lo haga en forma de una persona que nos guste en todos los sentidos, incluido el físico. Pero sobre el corazón no se manda, y hay veces en que una chica poco agraciada nos conquista y no podemos evitar querer estar con ella.
Puede que al principio te resistas a verla como novia, pero si el amor ha llegado a tu vida no podrás hacer nada, y por mucho que luches contra esa idea, terminarás por rendirte. Si te encuentras indeciso, las buenas noticias son que tener una novia fea también tiene sus ventajas.
¿Quieres saber cuáles?
No tendrás que temer que te sea infiel
La infidelidad es uno de los mayores temores de toda persona, y, especialmente en el caso de chicos algo inseguros, puede ser un problema demoledor. Cuando tu chica no atrae a otros hombres ese sufrimiento desaparece, y los celos no se convierten en un veneno para la relación.
Te tratará como nadie lo haya hecho
Ella será consciente de que es muy afortunada de estar contigo, y por tanto, cuidará mucho su tesoro: tú. Si te gusta que te presten atención, que te cuiden y que estén pendientes de ti, tienes muchas más opciones de que una chica fea tenga ese tipo de comportamientos que si te decantas por una chica guapa, que suele estar más preocupada de sí misma
Podrás vivir el amor sin sufrimiento
Si te has enamorado de ella es evidente que tiene muchas cosas que te gustan y que podrás disfrutar. Quizás comparte tus aficiones, es divertida, simpática o tiene una conversación de la que nunca te cansas. Todas estas virtudes siempre se verían empañadas por el continuo temor a perderla que conlleva tener como pareja a una chica guapa y sexy. Con ella puedes disfrutar todo eso sin pasar las horas sufriendo por cómo sería tu vida si ella te abandonase.
Será más dócil, sumisa y complaciente
No es sólo una novia fea esté más centrada en complacerte en todo aquello que te gusta, sino que además puedes esperar de ella una actitud más sumisa y menos propensa a discusiones y peleas. Aunque no habléis cada día sobre ello, tu novia sabrá que es la más afortunada en el reparto de cartas, y por tanto no querrá poner en peligro su suerte con broncas absurdas y sin sentido.
No andará buscando a alguien mejor que tú
Todos tenemos complejos y nos sentimos inferiores en algún aspecto. Una novia demasiado guapa hace que esos temores aumenten, ya que creemos que cuando ella descubra nuestras debilidades, le será más fácil encontrar a alguien mejor. Una fea ni se planteará semejante maniobra, ya que sus posibilidades de enamorar a otros son mucho más reducidas. Por eso minimizará tus fallos y difícilmente pensará que existe alguien mejor que tú.
Tú serás el más sexy de la pareja
No subestimes la satisfacción que esto puede llegar a producirte. Es bastante posible que algunas de las amigas de tu novia también sean feas, por lo que, a ojos de todas ellas, serás un auténtico sex symbol. Con una novia guapísima tienes que hacer un montón de sacrificios para estar a la altura, y por más que te esfuerces, siempre serás el menos agraciado. Tener una novia fea puede hacer que tu autoestima suba al comprobar como su círculo de amistades te trata como si fueras Brad Pitt.
Todo el mundo pensará que tienes nobles sentimientos
Son pocos los hombres que miran más allá de una cara bonita o un físico atractivo. Por esa razón, tener una novia fea te hace diferente al 99% de la población masculina, ya que todo el mundo interpreta que eres alguien que toma en consideración los valores internos. Esto puede granjearte simpatías y abrirte puertas inesperadas, ya que los demás verán en ti cualidades inusuales en la mayoría de las personas.
Ya lo ves, tal vez no tengas que darle tantas vueltas al tema y sea mejor dejarte llevar que andar pensando en el que dirán. Si sientes algo por esa chica y ella lo siente por ti, eso es magia, y no necesitas de la aprobación de las demás. ¡Quizás una novia fea te haga más feliz que una guapa!