Frases ingeniosas para ligar
En el arte de la seducción, las primeras impresiones son las que más duran. Una buena frase en el momento adecuado puede ser clave para lograr una buena primera impresión, pero para eso debes saber cuándo es el momento adecuado.
Para empezar, aquí tienes algunas.
Algunas frases interesantes para usar
Hay muchas frases interesantes, que llaman la atención o fomentan la curiosidad o la risa. Esas son las que debes utilizar, ya que puede que ella no recuerde lo que dijiste o hiciste, pero sí recordará cómo la hiciste sentir. Para empezar, puedes usar alguna de estas:
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Hola, ¿cómo te va? (simple y cásico)
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Tú: ¿Sabes cuánto pesa un oso polar? (Ella te mirará, sorprendida. Lo más probable es que responda un “No”, o un “No lo sé”) Lo suficiente para romper el hielo. Hola, soy (tu nombre).
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Tengo muchos caminos que podría recorrer, pero elijo el que me lleva a ti. Soy (tu nombre), y he llegado a destino. Mucho gusto.
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¿Te conozco? Luces como mi próxima y maravillosa novia.
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Tengo una duda. Si tu sombra es la segunda cosa más linda en este sitio, ¿cuál es la primera?
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Sospecho que tú eres la protagonista de esta película. Me encantaría vivir muchas aventuras contigo. Hola, protagonista, soy (tu nombre).
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¿Eres una cámara de fotos? Porque cada vez que te veo, sonrío.
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Anoche estaba leyendo Números, y me di cuenta de un gran problema, No tenía el tuyo (Esta es ideal para una chica cristiana).
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Si te paras frente al espejo con once rosas, verías doce cosas muy bellas.
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¿Te llamas wi-fi? Porque creo sentir una conexión.
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Eres como un sueño. Abstracta, grandiosa y me haces sentir cosas agradables.
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¿Te gusta el agua? (Ella: Sí) Pues eso significa que te gusta el 75% de mi persona. Hola, soy (tu nombre).
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Hasta el día de hoy, no pensé que podría existir la encarnación de la poesía en persona.
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¿Eres religiosa? Porque pareces la respuesta a mis plegarias.
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Tenía una frase genial, pero te vi y me la he olvidado por completo. Así que intentaré desde el principio. Hola, ¿cómo estás?
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Sólo para asegurarme que no estoy soñando, ¿me honras con tu nombre?
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Buenas noches. Busco mujer que honre a su género. Me parece que es usted la indicada para ello. ¿Qué la parece?
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Si fuese director de cine, no dudaría en contratarte para ser mi musa. Hasta ese entonces, me gustaría conocerte mejor, señorita.
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Me parece que has dejado caer algo. (Ella: ¿Qué?) Tus estándares. Hola, soy (tu nombre) gusto en conocerte.
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¿Puedo tomar tu mano? Siempre quise darle la mano a una estrella.
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¿Me prestarías un beso? Te lo devuelvo enseguida.
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Eres como un diccionario. Le das sentido a mi vida.
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Me gustan las buenas historias, y tú pareces estar en una. Soy el personaje que faltaba, mucho gusto. ¿Cómo sigue la historia?
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No sé lo que veo en ti, pero no lo he visto en nadie más. ¿Qué otros misterios escondes?
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¿Te quieres a ti misma? (Ella responderá algo más o menos como “sí”). ¿Qué te parece si me dejas quererte a ti, para variar?
Si estas frases no te funcionan, despídete con educación. Demuestra que eres un ser civilizado y dejarás una buna impresión. Quizás ella no era para ti, pero alguien que te ha visto sí.
Frases que NO debes usar
Ten esto bien presente: el acoso sexual no es un cumplido, es una agresión, hasta criminal en algunos sitios. Olvídate de las groserías, de los insultos, de las frases subidas de tono, y sé creativo. Quizás no comprendas por qué estas frases (o similares) no funcionan, así que te lo explicaré:
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“Si te sigo a casa, ¿te quedas conmigo?” Suenas como un asechador, o un psicópata que terminarás cortándola en pedazos que dejarás por media ciudad.
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“Eres la esposa que pidió mamá” Un nene de mamá no atrae, repele.
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“Te veo con hambre, ¿quieres que te de algo para comer?” Desagradable, desubicado, grosero, repelente, en una palabra: no.
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“Ven que te voy a &($#%”#” Es la clase de cosa que una piara de jabalíes (cerdos salvajes) le diría a una señorita que camina sola por la calle. Nunca de frente y cerca, siempre de lejos y en grupo. Es violento, repugnante y repelente.
Esa muchacha no tiene por qué prestarte atención, así que si te rechaza, no dejes caer la sonrisa y ni se te ocurra insultarla. Eso sólo le demostrará por qué hizo bien en no prestarte atención. Si te comportas como una persona bien educada, puede que tengas otra oportunidad luego.