Cómo afrontar una cita a ciegas
Bueno, ha pasado. Has cedido a una cita a ciegas, por cansancio, porque te convencieron, porque dijiste que por qué no, o por motivos que tú sabrás. El tema es que ahora tienes una cita a ciegas, y quieres que salga lo mejor posible, o ver cómo te va. Si requieres algún consejillo…
Que sea en día de semana (laboral)
Un truco que sugieren las páginas de citas es que sea en un día laborable, de semana. De esta manera, si la cita no es lo que esperabas, o va mal, siempre puedes decir que mañana tienes que levantarte temprano para ir a trabajar. Si todo sale bien, siempre pueden tener otra cita el fin de semana.
No pongas tus expectativas por las nubes
Tendrás una cita a ciegas con una persona, no con un príncipe azul o con la estrella de cine de los cincuenta que siempre quisiste conocer (cuando era joven o aún estaba viva). Comprende que tú tampoco eres el pináculo de la perfección, y que puede que lo que veas en la primera cita no sea todo lo que esa persona es.
Vístete con ropa que adores
De ser posible, que no sean tus pijamas, que estarán en un sitio público y puedes enviar el mensaje equivocado. Si te sientes cómoda en zapatos planos y no en tacos, ve con zapatos planos. Si los pantalones de vestir te resultan incómodos, no vayas con pantalones de vestir, hombre. Cuando una persona no está cómoda con su ropa, se nota, y no importa que sea una prenda de millones de dólares, no te verás bien con ella.
Llega unos minutos antes al sitio acordado
El llegar tarde es una falta de educación si te están esperando. Si vas a un sitio en hora pico, sal antes, o avisa que llegarás algo tarde, pero no le dejes con la duda de si vas o no. Mientras esperas, evita lucir como si te aburrieses: lleva un libro, usa tu Smartphone, revisa el menú, etc. Cuando llegue tu cita, déjalo de lado y préstale atención.
Deja a un lado el alcohol
Un blog de un muchacho desagradable, en una de sus entradas, decía cómo tener sexo en la primera cita con una mujer, y eso incluía darle alcohol hasta que no pudiera resistirse. En otras palabras, una apología de la violación. NO, y repito, NO tomes alcohol en la cita a ciegas, y niégate si él o ella quieren que bebas. No sólo por el riesgo mencionado antes, sino por lo que puedes decir o hacer si llegas a la borrachera.
Deja el celular apagado, por Dios
O por la divinidad en la que creas, o por favor, si no crees en ninguna. Si siempre tienes que contestar el Whatsapp, o te la pasas enviando mensajes o revisando tus redes sociales, envías el mensaje que la otra persona no te importa. Puedes pasarte al menos quince minutos para ver si esa persona vale la pena, los mensaje son se van a ir si los dejas un cuarto de hora sin atender.
Planea una ruta de escape
Si la cita no es en día laborable, pídele ayuda a una de tus amistades. Por ejemplo, que te llame a los 45 minutos de la cita y, si todo va bien, finge que es un llamada trivial. Si quieres huir por el motivo que sea, dile a tu cita que es una emergencia y que lamentas tener que irte. Deja el dinero de tu consumición (no seas miserable), y escapa antes que te pida tus datos de contacto.
Ofrece pagar la cuenta a medias (si eres mujer)
Si una mujer sugiere pagar la cuenta a medias, envía el mensaje que es independiente y que no tiene intenciones de ser una mantenida. Aunque su cita se rehúse, al menos habrá hecho la proposición. Si un varón lo hace, envía la señal que es un tacaño. Sí, triste, pero al menos se va mejorando en ese sentido.
Sólo si crees que vale la pena seguir viéndose, intercambien datos
El que un varón le pida su número a una mujer, sin darle su número a la mujer, envía mensajes muy negativos. Si eres varón, dale tu número y dile que le gustaría mantener el contacto. Si eres mujer y deseas ver hacia dónde va, ofrécele intercambiar números, pero no des el tuyo a menos que él te dé el suyo primero. Si no tienes intención de una segunda cita, díselo de forma clara y educada, sin llegar a la ofensa pero sin mentir.